LA ABURRIDA
TELEVISION DE LAS TERTULIAS
Las
vacaciones veraniegas en televisión resultan terriblemente acusadoras.
Revelan la
pobreza imaginativa de los programas que sirven, sin excepción, las
televisiones, generosas en el ofrecimiento de todo tipo de tertulias en las que
los asistentes hablan y opinan de lo divino y lo humano aunque no sepan nada ni de lo uno ni de lo de más allá y ni siquiera hayan
preparado al menos algo de lo que van a tratar y se roban la palabra unos a
otros en un reiterado ejercicio de
descortesía y falta de compañerismo
Se trata de
un sistema facilón y barato de llenar el
tiempo televisivo con el uso y abuso de esa fórmula manida que
paradójicamente nació en la radio y permiten hoy las emisoras televisivas con desprecio absoluto a las normas
científicas del periodismo universitario y transgresión continuada de la
normativa legal vigente.
Antes de que
naciera la tele las noticias se recogían en los periódicos y los informativos
hablados se reducían a los que emitía la radio oficial en las voces campanudas
y de perfecta vocalización de los locutores, nunca locutoras, reservados a este
menester que consistía en la lectura ante el micrófono de los noticiarios a
gusto del poder que no perdían su nacimiento
en la prensa escrita y se llamaban por ello Diarios hablados.
En la radio
no se podía ni informar ni opinar hasta que se restauró la Democracia y las
voces unívocas se multiplicaron dando noticias
y emitiendo sin parar juicios de valor.
La tele copió
a la radio y así seguimos. Los dueños de
las emisoras comprendieron que ganaban más dinero con esta fórmula que pagando
el rodaje de producciones creativas. “Los gozos y las sombras”, “Verano azul”, “Curro
Jiménez” y muchas otras series se quedaron sin continuadoras y ahora, cuando
llega el verano y los gestores televisivos acuden al frigorífico en busca de
sustento no encuentran nada.
La tele es
muy aburrida en los meses de calor.
Cualquier día
de estos programa la Uno “Verano azul”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario