viernes, 12 de agosto de 2022

 

GOYESCAS

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Los franceses nos ganan. Han hecho de las corridas goyescas un referente de arte y cultura con categoría y buen gusto

Como es sabido, Francisco José de Goya y Lucientes​ ​ fue un pintor y grabador español. cuya obra abarca la pintura de caballete y mural, el grabado y el dibujo. Nació en 1746 en Fuendetodos  que está en Aragón y murió en Francia a los ochenta y  dos años.

Sus paisanos quisieron celebrar el primer centenario de su fallecimiento y para ello organizaron un festejo original en la plaza de toros de la Misericordia de la ciudad del Ebro en la que todos los toreros vestirían a la usanza de la época.

Esto sucedía el 12 de mayo de 1927 y los espadas fueron nada menos que Rafael el Gallo, Nicanor Villalta y Pablo Lalanda que sustituía a su primo Marcial.

Casi treinta años más tarde, el 16 de Octubre de 1954, Antonio Ordoñez que era de Ronda quiso homenajear a  su paisano Pedro Romero y organizó en la plaza de toros que pertenece a la Maestranza rondeña otra corrida goyesca que se ha ido repitiéndo año tras año en el mes de septiembre.

Y también en el mismo mes, los franceses taurinos que son los que residen en el sur del Pais Galo han venido ofreciendo en Arles desde principios de esta década un festejo igualmente goyesco  que constituye la unión armoniosa del toreo, la bravura, el arte pictórico y el bel canto.

Estos son los tres hitos importantes que aparecen en el nacimiento y desarrollo de las corridas goyescas. Da la impresión de que está todo inventado, pero  Antonio Ferrera no debe creerlo así cuando en la goyesca  celebrada recientemente en Santa Cruz de Mudela incluyó un grupo flamenco de guitarra, cantaor bailaor y caja de ritmo que actuaron desde el tendido desviando la atención de los espectadores e interfiriendo su sonido con el de la banda de música. Un lío.

El torero sabe cómo lo hacen en Francia  porque el año pasado en Arles la banda de la plaza, Chicuelo segundo, que dirige Rudy Nazy interpretó su pasodoble cantado por  la mezzosoprano Estelle  Mazillo.

¿Mejorar eso?

Aunque nos cueste reconocerlo hasta ahora los franceses lo hacen mejor.

 

 

 

 

 

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