LA ATOSIGANTE PUBLICIDAD
...
De todos es sabido que la publicidad son esos mensajes de imágenes y texto que en los
medios de comunicación intentan mover la voluntad de quien los recibe en
beneficio de quien los promueve y paga para que los emitan.
Cuando esta finalidad no termina en la tienda o el
supermercado y el mensaje consiste en la divulgación de una idea política,
religiosa o social, aunque sea efectuada a cambio de dinero deja de llamarse comercial y se conoce como propaganda.
Creo que en la actualidad estas interrupciones
continuadas de las noticias, reportajes, programas especializados o películas
de ficción que recibimos por radio, televisión o a través del móvil están necesitando
imperiosamente un control y hasta un freno que no hay que derivar de nuevas
disposiciones normativas porque estas existen desde tiempos anteriores y lo que
procede llevar acabo sin demora es simplemente hacerlas cumplir.
La publicidad se justifica como un sistema admitido por
la sociedad mediante el que los medios se liberan de obediencias partidistas.
El costo de un medio cualquiera de comunicación nunca ha
sido compensado por su precio de venta
pero una cosa es cubrir la diferencia de gasto con mensajes comerciales y otra
muy distinta aumentar estos en detrimento
de la publicación.
El exceso de publicidad disminuye su eficacia y agrede al
receptor.
En esto deberían pensar los programadores publicitarios
actuales y los que cobran por evitarlo
¿Qué haríamos sin el mando a distancia?
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