miércoles, 14 de julio de 2010

Se recuperó la tranquilidad.

Ha vuelto la serenidad del silencio. Al menos la que se desprende de las pantallas de los televisores, revueltos y gritones los últimos días con el moscardoneo de las vuvucelas y los cánticos de las peñas pamplonesas.

Los primeros son unos instrumentos mefistofélicos para los que no se precisa conocimiento alguno de solfeo, sino todo lo contrario: mientras más preparado se esté para destrozar la armonía de los sonidos, mucho mejor.

A las vuvucelas deportivas las ha sustituido con pleno ejercicio de capacidad para taladrar tímpanos la estridencia del acompañamiento sonoro del que suelen dotarse las peñas de los pamplonicas que, por las tardes, han llenado los graderios de la plaza de toros de los Sanfermines con un estruendo ensordecedor.

En el coso de Pamplona se vienen cantando por los mozos añejos motivos musicales que van desde la “Chica Yeye” de Conchita Velasco al “Yo soy el rey”, la ranchera mejicana de Vicente Fernández que estrenara el popular astro de la pantalla Jorge Negrete. No ha habido incorporaciones a esta colección reducida . Pero en su versión instrumental han avanzado muchísimo. Tanto que hasta han sustituido las tubas por los impresionantes helicones, que son esos trombones de dimensiones gigantescas y de forma circular que se colocan alrededor del cuerpo del instrumentista.

¡Casi nada tiene que ser atender al desarrollo de una corrida con un vecino de localidad provisto de uno de estos instrumentos de martirio diabólico!

Curiosamente el Helicón era un monte de Beocia consagrado a las Musas al que se llegaba en busca de inspiración poética.

Está visto que los humanos contemporáneos hemos alcanzado la luna, pero estamos demostrando que somos capaces de hacer trizas las costumbres más antiguas.

Hoy el televisor parecerá mudo. Libre de vuvucelas y helicones. Y, aunque griten y se alteren los políticos en el Debate que se traen entre manos, dará la impresión de que se ha recuperado la calma de ese sosiego indispensable para el reposo veraniego que todos tenemos bien merecido.

2 comentarios:

No cogé ventaja, ¡miarma! dijo...

Ofú, ya era hora de descansar un poco de todo este jaleo.
Por cierto, ¿se habrá enterado que España ha ganado la copa del mundo de futbol?, seguro que sí. siempre le he conocido bien informado.
Un abrazo

CLAUDIO DAMASCENO dijo...

Interessante!

www.designmirador.blogspot.com

www.casdamasceno.blogspot.com