lunes, 7 de febrero de 2011

Cincuenta años de la Virgen del Rocío bajo palio

Yo dije en mil novecientos noventa y siete , en un momento de mi Exaltación al setenta y cinco aniversario de la creación del Lunes Santo que me habían pedido las hermandades de este día, un verso que he recordado ahora:

Todo el barrio es como un ruedo,
rebordeado de sol.
Balcón en palacios viejos
y un elevado reloj.
No terminó la mañana
y ya la puerta se abrió
y, sobre piedras antiguas,
va caminando un color:
Verde será con la Virgen;
morado con el Señor,
que, con morado se pena,
y se suplica perdón.
Y Cristo viene besado
por el supremo traidor.
Todo el barrio es como un ruedo
rebordeado de sol
que, en las potencias divinas,
hilos de oro enredó.
Besos de Judas que, artero,
en la mejilla posó.
Judas será, desde entonces,
como el estigma peor,
como adjetivo maldito,
como perenne baldón.
Pero el trabajo de Cristo
fue desde aquí redentor.
¿Sabe este barrio de siglos
que esto es así?... Sí, señor.
Todo el barrio es como un ruedo
rebordeado de sol
que está esperando que luzcan
caireles de relumbrón.
Que está aguardando que salga,
toda hecha luz y esplendor,
esa Virgen del Rocío,
sin el andar ni el tambor,
sin el tapiz almonteño,
sin el cohete y la flor
y sin repiques de plata
ni cantarina oración.
Pero con clase y con garbo
Porque es la Madre de Dios,
porque es divina hermosura
en penitente rincón.
Todo el barrio se hizo un ruedo
rebordeado de sol
cuando la luz de los Cielos
de Santiago salió.

Cincuenta años ya de esta primera salida procesional bajo palio de Maria Santísima del Rocio en Estación de Penitencia. (¡Cómo pasa el tiempo!)

Para conmemorar tan feliz acontecimiento, la Junta de Gobierno de la Hermandad ha programado una serie de actos que empiezan hoy lunes 7 de febrero, a las nueve de la noche, en la iglesia de Santiago con “La construcción de un sueño: un palio para María Santísima del Rocío”, mesa redonda a cargo de hermanos que formaron parte de esa primera salida del año 1961: Alfonso Jaramillo González, Fernando Baquero Santor y Manuel Yruela Rojas.

Que sea enhorabuena

1 comentario:

Anónimo dijo...

Cuanto brillo en el verso!