En Sevilla hablar del Pregón, así a secas, supone hacer referencia inmediata al de Semana Santa, es decir el Pregón grande, que se pronuncia, con el boato implantado ya por la costumbre, en un gran teatro, con amplia colaboración musical el Domingo de Pasión.
Pero hay otros pregones. Del Consejo General de Hermandades y cofradías depende también el de las Glorias, crecido en importancia, oradores y puesta en escena en los últimos tiempos… De las numerosas Hermandades del Rocío los que cada una organiza como acto insoslayable inserto en la ristra de ceremonias y celebraciones previas a cada romería… Y de otras corporaciones de penitencia o de gloria los que suelen promoverse a lo largo del año conmemorando efemérides diversas.
La Virgen del Carmen, Estrella de los Mares y capitana de tantas embarcaciones que surcaban bravamente los oceanos antes de la ayuda de la electrónica y los satélites, es hoy también en Sevilla la advocación venerada por una hermandad y cofradía de penitencia, la Virgen del Carmen en sus Misterios Dolorosos,
y a mi hijo Javier le encargó la corporación a la que pertenece la Exaltación del XXV aniversario de la bendición de la Imagen.
Estuve allí, en la Iglesia espléndidamente restaurada de Omnium Sanctorum, me sentaron en el primer banco, pero me sentí como detrás de la barrera cuando José María Manzanares asiste a cualquiera de las corridas que torea su hijo.
Con las debidas distancias en el símil comparativo.No faltaba más.
Días atrás he visto a mi hijo atareadísimo en las labores previas de acopio de datos para confeccionar la disertación… he atendido a su aprovechamiento de momentos libres para redactarla… luego a su zozobra para medirla y que no excediese del tiempo aconsejable… a sus intentos de memorizar algunos fragmentos, sobre todo los finales de párrafo…En fin a todo aquello engorroso y árido a lo que debe enfrentarse un pregonero si desea satisfacer las expectativas de los que han depositado su confianza en él.
¿Conocen o suponen los miembros de cualquier Junta de Gobierno estos trabajos e inquietudes?... Quien acepta un encargo así es consciente de la responsabilidad que asume y de los esfuerzos que habrá de afrontar y lo único que suele pedir a cambio es que su ardua tarea obtenga la recompensa de una audiencia masiva y cualificada.
Por eso cuando esto se produce y, a pesar del calor, el acto goza de la prestancia
de los asistentes y se agotan los asientos disponibles en los bancos y el altar es una muestra de buen gusto destacando la belleza arrebatadora de la imagen de la Señora, el pregonero puede empezar a contestarse que valieron la pena tanto esfuerzo, tanta entrega, tantas horas de vigilia…
… y hasta le parecerá que la Virgen,cuando la mira de reojo, le hace un guiño de complicidad.
2 comentarios:
Hablo desde el conocimiento de preparar la disertación de un pregón, desde la preparación que conlleva el texto y su contenido, la documentación y los preparativos de un pregón es algo que generalmente para inadvertido. Desgraciadamente, hoy llega más si nombraste a esta u otra cofradía, o si políticamente, en su sentido más estricto, es correcto en forma, modo y ejecución.
Lo que pasa inadvertido es como muy bien ud. nos recuerda, Sr. Garrido, es la GENEROSIDAD del pregonero. Algo que quienes los nombran deberían tener en cuenta.
Reciba un cordial saludo a la sombra de nuestra Giganta.
Elena Morillo
Delicada y oportuna reflexión.
Correspondo al saludo con otro igual y a la misma sombra.
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