martes, 2 de marzo de 2010

Moeckel pregona en Madrid.

Joaquín Moeckel ha pronunciado este año el XVI Pregón de Semana Santa que organiza la hermandad de Los Estudiantes de Madrid.

Leo que ya el anuncio de esta intervención levantó amplias expectativas en el orbe cofrade madrileño y que el abogado las ha satisfecho con creces.

Me alegro mucho.

He sabido que el pregón comenzó con la reproducción por megafonía de la I Saeta del Silencio, a la que siguió la presentación del pregonero a cargo de Paco Robles.Que tras ésta, de nuevo en megafonía sonó la marcha Inmaculada Madre de la Iglesia, obra de Abel Moreno y dedicada a la titular mariana de la hermandad y que Joaquín empezó diciendo que ser cofrade en Sevilla es muy fácil pero en Madrid muy complicado y que articuló un discurso a modo de mensaje de un cristiano que habla claro, de un cofrade para cofrades y no cofrades y no eludió las cuestiones candentes contra las que todo buen cofrade se revela hoy como son la eutanasia, el aborto o la retirada de los crucifijos.

Ha llegado a mis oídos igualmente que empleó un tono íntimo, personal y, por supuesto alejado de barroquismos poéticos. Y me parece muy bien.

He recordado que Joaquín Romero Murube no incluyó en su Pregón sevillano de 1944 ninguno de sus versos aunque dedicó gran parte del mismo a la Epístola moral a Fabio y que, tras haberlo desarrollado más en el proscenio que tras los micrófonos del escenario, hasta terminó de una forma extremadamente coloquial:

“… como no sé si he dicho lo que quería decir, ni cómo he dicho lo que he dicho, me despido de ustedes de un modo más llano y español: Señoras y señores, quedaos siempre con Dios”

Un ejemplo inolvidable.-

9 comentarios:

Zapateiro dijo...

Pues siento discrepar profundamente. Yo no soy persona de demasiadas cosas "oficiales", por lo que los pregones no es que me vuelvan loca, pero entiendo que un pregón que deba anunciar lo que viene, que es ni más ni menos que la Semana Santa de un pueblo concreto, no tiene mucho que ver con discursos doctrinales católicos que bien pueden darse en otros foros y formatos.
No hablo de este pregón de Madrid concretamente sino de cualquiera.

Por último, decirle que más valiente me parecería que muchos de esos católicos que que se dan golpes en el pecho no fueran unos fariseos, que los hay a patadas.

Jesús representó mucho más amor y libertad que la Iglesia que habla en su nombre.

Un saludo.

Un saludo.

Antonio dijo...

Ciertamente un pregón que no tenía como eje central la Semana Santa de Madrid, animando a todos a visitarla,contando los detalles que la hacen especial (la desconozco por completo), etc. etc.... desde el punto de vista, claro que sí, de alguien cristiano, católico, etc. como dice ser Moeckle... no tiene porque hablarnos de otra cosa que se sale de Evangelios, etc. etc.... No es un buen pregón, y no me hubiera gustado, eso sí, sera una buena pieza literaría quizás, un mejor panfleto seguro pero un pregón.... no, no.... desde mi punto de vista claro. Como en estos años pasados en Sevilla donde hubo inserciones políticas que no venían a cuento...

Estoy con la anterior comentarista en lo de fariseos al cien por cien.

Espero que en esta ocasión se abra al debate ya que un blog está para eso, si es del gusto del anfitrión.

Saludos
Antonio

Jordi de Triana dijo...

CRISTO HA MUERTO EN EL BARATILLO
Con la venia del maestro y aprovechando que D. Joaquín Guillermo y el pregonero de la Semana Santa de Sevilla del 2011 son hermanos del Baratillo, escribo lo siguiente:

CRISTO HA MUERTO EN EL BARATILLO

Tarde de Miércoles Santo en el Arenal Torero, las brisas del Guadalquivir acarician su cara de niña y su pelo es perfumado por aromas de jazmín, guardan silencio los tendidos maestrantes.

Túnicas nazarenas y pies descalzos sobre la arena del coso baratillero, lances de Muerte en un Lirio que va dormido en los brazos de una Rosa y rejones hirientes que atraviesan el alma de un Barrio torero.

La suerte está echada. Verónicas y volapiés de pasiones, ecos lejanos de torería y pases profundos al pecho de la pena que embarga a la más tierna Azucena, Caridad de mis entrañas.

Misericordia y Piedad visten de luto el Cielo a la otra orilla del Río. Languidece el torso moreno de mi Cristo vencido a la Muerte que va dormido en el Regazo de una Madre que llora sin consuelo.

Claveles color sangre a los pies del Señor, puñales penetrantes en el pecho de la Virgen y una sinfonía de sueños que yacen en la compasión de una mirada conforman enternecedor Misterio.

Sevilla le muestra su pañuelo, pero es tanta la pena que la Virgen quiere llorarla a solas con su Hijo entregado a fatal condena.

Una enlutada abuela va pregonando con sus ojos envueltos en lágrimas “Cristo ha muerto en el Baratillo”, “lo traen a la Catedral por Adriano”, “silencio que no despierte, Sevilla está de luto, puedo escuchar sus silencios maestrantes”.

No es la Muerte el fin que persigues, Tu semblante lo dice todo Padre Mío, cercano está Tu desplante y la vuelta a la vida.

Es Tu paso un barco que navega al compás de olas pasajeras hacia un profundo Mar color celeste. A ese que iremos todos para volver a estar Contigo.

Viene la Caridad por el Postigo, filigrana entre varales de plata, molde de porcelana y pasiones encendías. Se marchará su palio al compás de la música, se marchitarán las flores, se consumirá la cera y Sevilla quedará rendida a sus encantos.

Jordi de Triana dijo...

Humildemente he de decir que antes que cofrades somos católicos y como tales no podemos silenciar las injusticias.

Para suerte de los cofrades de Sevilla nunca daré un pregón cofrades, en otro caso no dudaría en pregonar en favor de la vida y del amor.

No olvidaría a tantos niños que fueron privados del más elemental derecho: la vida.

Desde aquí mi respeto y cariño hacia quienes alzan la voz contra cualquier injusticia.

Un abrazo admirado maestro.

Antonio dijo...

Jordi ¿por qué en pregones anteriores no se hacían esas menciones y ahora si? Cuando recordemos, en España,la ley del aborto lleva muchos en vigor.

Ahora se postula por la familia tradicional y se desprecia no sólo la que es únicamente civil sino también la que es entre personas del mismo sexo. ¿No ha habido siempre en nuestras cofradías personas con esta opción sexual en cargos, relaciones directas, etc y lo sabía todo el mundo? Pero ahora es cuando políticamente conviene o la mano que mece la cuna ha dicho que interesa...

El tema de quitar los símbolos religiosos en los centros públicos lleva años en el debate público y de hecho se han ido quitando paulatinamente pero la conciencia sólo ha saltado a los atriles cuando ...cuando... cuando...

Vivamos la semana santa sin excluir por favor. Porque en caso contrario cumplan los preceptos a rajatabla y quédense sólo los que cumplen el catecismo católico (dejemos la Palabra de Jesús de lado por favor) y ¿cuántos quedarían? ¿por qué no se hace?

Saludos
Antonio

José Luis Garrido Bustamante dijo...

El "anfitrión" entra en el debate encantado, respetando las opiniones de los demás y tratando de exponer la suya brevemente.
Antes felicita a Jordi de corazón y luego dice que nadie es perfecto y que mientras estemos por aquí podemos ser o parecer fariseos. Eso no quita para que tratemos de celebrar la Semana Santa como Santa,según lo hicieron quienes la inventaron si no con Fernando III sí con el Via Crucis a la Cruz del Campo. Y siempre con soberanía plena que no ha excluido a nadie nunca como sabe todo aquel que vive las Hermandades desde dentro y sobre todo quien da un Pregón que es exaltación lírica pero que cada orador puede articular como desee. Por supuesto sin excluir la palabra de Jesus que nos situaría en un desfile cofrade "por lo civil" como triste sucedáneo de lo que debe ser.
Un abrazo a todos.

Jordi de Triana dijo...

Amigo Antonio, si piensas que excluso a una sola persona de nuestras Hermandades y Cofradías creo que me conoces de poco. Todo lo contrario, simplemente he transmitido mi particular visión. Nuestra Semana Santa es razón de felicidad y sus puertas están abiertas para todos: quienes admiran su belleza, su música, sus silencios, el movimiento de los pasos..... Una cosa es mi visión y otra mi respeto y cariño hacia cada persona que siente algo especial por nuestra Semana Santa. Para mí, hablar en favor de la vida no es hacer política. Los cofrades al hablar de nuestras cofradías olvidamos ideologías.

Un abrazo maestro y gracias y otro a Antonio, excelente bloguero.

No cogé ventaja, ¡miarma! dijo...

Perdón pero no me gusta nada el cristianismo pregonado por el Sr. Moekel. Tengo una anecdota que me derrumbo a este señor para siempre.
Saludos

Antonio dijo...

Agradezco la intervención del anfitrión y de Jordi (también gracias por sus palabras) simplemente por el hecho de haber contestado. No es habitual en muchos otros sitios.

Saludos
Antonio