viernes, 6 de noviembre de 2009

Relevo en la Archidiócesis.

Buena idea han tenido los periódicos de Sevilla al pedir a los lectores de sus ediciones digitales que redacten frases de despedida para Monseñor Amigo.
Vox populi,vox Dei, que afirma la antigua locución latina. La voz del pueblo es la voz de Dios. Y más de una lágrima mojará los bolígrafos cuando las palabras sencillas de la gente llana salten por encima de las barreras de los prejuicios, las cortedades y las tibiezas llevando a la mano el blanco pañuelillo del adiós.

Dicen que no son tristes las despedidas y a quien lo afirma digo…que se despida, advertían los sabios populares antes de que sus letrillas y consejas las recogiera el abuelo de los Machado.

Alguien lo había supuesto con tanto ir y venir de vehículos de Mudanzas Rocío desde el Palacio Arzobispal.Pero el Cardenal supo mantener el sigilo mientras duró su larga y habitual audiencia del día de San Carlos Borromeo,su onomástica, ocultando la carta con la aceptación papal a su dimisión por razón de edad que ya guardaba en el bolsillo de la chaqueta, cuyo contenido desveló al presidente del Consejo de Cofradías.

Su sucesor, el arzobispo Asenjo,habría sido advertido con antelación.De otra forma no se explica su prolija misiva al pueblo fiel heredero de las sabias enseñanzas de Isidoro y Leandro, leída en contraste con las frases sencillas y transidas de atenuada emoción de quien se ha llevado mas de un cuarto de siglo de Arzobispo de Sevilla desarrollando una labor impecable de la que se resalta en estos mensajes populares su abierta y comprensiva actitud ante los encierros de protesta por conflictos sociales en la Catedral o su cercanía a los mas necesitados, ya fueran los reclusos de la cárcel o la torturada familia de Marta del Castillo.

Hay también quien pondera sin titubeos lo descansada que va a quedar la Conferencia Episcopal Española donde más de una postura aperturista del purpurado no despertaba favorables ecos.

Y por supuesto se repite el convencimiento de que la ciudad pierde a uno de los mejores cardenales de su historia.

El tiempo le hará justicia. Y ya han empezado a contarse sus primeros minutos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola, queria invitarte a que agregues tu blog a espainfo.es
es un directorio de webs y nos gustaría que estuvieras.
saludos

Diego